HOY me concedes empezar mi nuevo trabajo. ¡Es muy pequeñito pero que todo tu amor les llegue!
María se llama la pequeña (cambio el nombre). Es disfásica y epiléptica. Si tú quieres que les llegue tu Amor ahí estará mi trabajo ahora. Sinó: Habla, Señor, que tu siervo escucha(1 Sam. 3, 1-10).
¡No sé explicar lo que siento! Como si todas esas mediaciones que son Presencia tuya fueran como desapareciendo, ya sola en ti, como si me hicieras correr hacia ti, como si tú condujeras "mis "pies de trapo", como me decía el tío. (Y es que tengo los pies cavos y me caía de pequeña mucho).
¿Es que vienes a mí en esta desnudez y pobreza?
¡Bendito seas!
¡Ven!, ¡Ven pronto!
Mantén mi puerta abierta,
mi lámpara encendida, mi corazón enamorado,
que nuestra unión se realice
en ese abrazo amoroso
en el que toda la Humanidad
y todo el Universo se unan en nosotros
porque tu Reino llega a plenitud!
Perdónanos
porque no sabemos lo que hacemos
(muchas veces),
juzgamos a los que están en las cárceles.
Y nosotros...
¡Amamos al Amor tan a trompicones!
Solo tú gracia y tu misericordia nos preceden!
1 comentario:
Hola Peregrina.
Nuevamente gracias por tu visita y tus hermosas palabras dejadas en mi blog.
Este otro tuyo, si que lo he leído completo, me he emocionado con tus relatos,y en ocasiones me sentido identificada. Yo también hace mucho que escribo para mi, como desahogo a veces y, para como bien dices comprenderme un poco mejor a mi misma y a los demás...
También tenemos en común ese amor por Él...
"No se explicar lo que siento" dices, yo tampoco sé, es tanto y tan profundo... y a la vez tan sutil, tan gozoso y hermoso.
Bueno Peregrina, seguiré viniendo por aquí para saber un poco más de tí y de mi ya que Él así lo ha querido.
Abrazos
Maria
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