Hoy
en la Eucaristía los hermanos me han dado tres palabras que te reflejan a tí en mi vida: humildad, sencillez y disponibilidad-servicio.
¡Bendito seas por tanto regalo
como nos has colmado!
Que cada vez sea más reflejo tuyo
para bien del mundo,
de la Iglesia
y
de la comunidad!
No hay comentarios:
Publicar un comentario